Las instituciones europeas están hartas, por no decir hasta salva sea la parte, del Tribunal Supremo, sobre todo en lo que se refiere a sus doctrinas sobre los abusos de la banca española a los consumidores. La postura de defensa radical de los intereses de las entidades financieras por parte de la Sala de lo Civil del Alto Tribunal está colapsando a la Unión Europea, tanto a nivel judicial como en los organismos políticos.
Desde hace varios años, Diario16 ha publicado distintos análisis sobre el IRPH, las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que fueron retorcidas y distorsionadas por el Supremo español, y, sobre todo, hemos analizado distintos elementos que, en base a distintos informes oficiales, demuestran la abusividad y la falta de transparencia del IRPH.
Uno de esos elementos es la presunta manipulación del índice por parte de las entidades financieras españolas. La claridad y la ingente cantidad de pruebas contenidas en informes como el de Consumo Baleares o el del Ministerio de Consumo, y que han sido publicadas en exclusiva por Diario16, provocaron que un afectado interpusiera una reclamación ante el Comité de Peticiones del Parlamento Europeo.
«La petición se hizo cuando empezaron a salir las noticias de Diario16 y decidí llevarlo al Parlamento. Dije que estaban saliendo noticias de que en España se había manipulado un índice, el IRPH, y que cómo era esto posible en Europa y nadie hiciera nada al respecto. También pedí que se eliminara dicho índice por ser tan fácil de manipular. Luego, cuando publicasteis el informe ‘oculto’ lo adjunte a la petición, al igual que la imagen de la prueba manipulada, la oferta vinculada en el juicio de la Audiencia Provincial de Baleares», afirma a Diario16 el afectado.
La respuesta del Parlamento Europeo, firmada por la presidenta de la Comisión de Peticiones, Dolors Montserrat, a la que este medio ha tenido acceso, señala con claridad que se «ha examinado su petición y la ha declarado admisible, ya que el asunto que usted plantea [la manipulación del IRPH] entra dentro de los ámbitos de actuación de la Unión Europea. Por ello, he pedido a la Comisión Europea que lleve a cabo una investigación preliminar sobre este asunto».
Por otro lado, se informa al afectado que la Comisión está recibiendo un número sustancial de quejas sobre la «incompatibilidad de la jurisprudencia del Tribunal Supremo español sobre referencias al IRPH».
El abogado José María Erausquin reconoció a Diario16 lo que los representantes de la Comisión Europea le dijeron «en la Gran Sala del TJUE, donde se concentraba mucha gente relacionada con el TJUE y con la Comisión Europea, en esos momentos previos de tensión a la espera de que se inicie la vista, nerviosos, comenté que por fin se acababa este asunto, que para bien o para mal ya finalizaba, y que fuera lo que Dios quisiera, pero que acabara de una vez. ¿Qué te crees que nos dijo una de las personas allí presentes? ‘Amigo, las cosas de España no se acaban nunca. Esto necesita tiempo porque irá, volverá, irá, volverá’. Esta persona nos recordó que los jueces españoles no acostumbran a aplicar directamente las resoluciones del TJUE, que esperan a que el Tribunal Supremo les diga cómo tienen que hacerlo, y que como siempre hay algún juez díscolo que no acepta esa interpretación y eleva nueva cuestión con dudas, el tema va y viene hasta el aburrimiento».
Por tanto, los organismos europeos están hartos de la Justicia española y de cómo se ha generado un estado de impunidad para los poderosos mientras millones de personas sufren las consecuencias. Sólo el IRPH supone que las entidades financieras cobraron 70.000 millones de más a sus clientes. Las pruebas están ahí, los informes oficiales están ahí, salvo para la Justicia española que, en este caso, sí es ciega porque no quiere ver lo que es evidente.
