Las autoridades israelíes liberaron esta madrugada a tres mujeres palestinas y treinta menores de edad. Esta liberación sigue a la entrega previa de un cuarto grupo de rehenes por parte de Hamás, como parte de las negociaciones en curso.
Los liberados fueron trasladados desde la prisión de Ofer, ubicada en Cisjordania, hasta la ciudad de Ramala, gracias a la labor de los vehículos del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). En Ramala, fueron recibidos con emoción por sus familias, marcando un momento de reunión y alivio en medio de un prolongado conflicto.
La Comisión para los Asuntos de los Detenidos de la Autoridad Palestina anunció previamente las identidades de los liberados a través de un comunicado en su perfil de Facebook, subrayando que esta acción forma parte de los términos del acuerdo de armisticio entre las partes.
Sin embargo, durante la espera del convoy de liberados, se informa que el Ejército israelí ingresó en la ciudad de Beitunia, cerca del centro penitenciario, y lanzó bombas de gas lacrimógeno, lo que generó momentos de tensión en la zona.
Esta liberación se produce tras la confirmación por parte de las Fuerzas Armadas israelíes de la liberación del cuarto grupo de rehenes retenidos por Hamás, quienes ahora se encuentran en territorio israelí bajo custodia militar.
Además, el portavoz del Ministerio de Exteriores de Qatar, Mayid al Ansari, anunció que Israel y Hamás acordaron extender la tregua iniciada el pasado viernes en el enclave palestino por dos días más, hasta el miércoles. Este acuerdo contempla la liberación de otros diez rehenes por día, a cambio de Israel entregando a 30 presos palestinos, manteniendo así la proporción de un rehén por cada tres presos, que ha sido una característica constante de los acuerdos entre ambas partes desde el inicio de las negociaciones.
Este paso hacia la liberación de más rehenes y la extensión de la tregua ofrecen un rayo de esperanza en un conflicto que ha persistido durante mucho tiempo, y se espera que se traduzca en un aumento de la estabilidad en la región. Sin embargo, sigue siendo fundamental que ambas partes continúen trabajando juntas para lograr una paz duradera en la región.
