77 mil veces compartido. Quizás a ti también te haya llegado. Se trata de un extracto de una entrevista que Pablo Motos le hace a Antonio Banderas. El actor, preguntado por la dureza del mercado americano, echa mano del pensamiento positivo y empieza la arenga. “Las cosas se pueden conseguir. No hay sueños imposibles. Se trata de trabajar y de soñar muy fuerte”. Y continúa. “Hubo unas encuestas en una universidad, creo que fue en Andalucía. El 75% de los estudiantes querían ser funcionarios. Esa misma encuesta se había hecho en EEUU, y el 75% querían ser emprendedores (…) Con un 75% de gente que quiere ser funcionaria no se hace país. Se hace país con gente que se la juega”. Así termina. 3 minutos que cuentan ya con más de 4 millones de visualizaciones.
Valga este vídeo, y también su repercusión, como ejemplo de lo bien instalada que está la idea de que, cuando todo empieza a caer, la culpa es nuestra por no esforzarnos lo suficiente. Un mensaje injusto y cínico que ha calado en un amplio sector de la sociedad. ¿Cobras 400 euros y curras 10 horas aunque tienes firmadas 4? ¿Eres falso autónomo? Soluciónalo. Fórmate, haz cursos, másteres, estudia chino y programación. Amplía tu capital humano y gana empleabilidad. El paro, la precariedad, no es un problema social, es tu problema personal. Este es el mensaje que se nos vende, y que genera frustración y angustia cuando se topa con la realidad.
Y es que la realidad es otra. Podemos seguir con Andalucía. Con un 48% de paro juvenil, una precariedad alarmante, y más de un 80% de jóvenes que cree que tendrá que emigrar para encontrar trabajo, ¿hasta qué punto sirven las soluciones individuales si estamos ante un problema estructural más que evidente? Por supuesto que es positivo formarse, pero es evidente que no todo depende de nuestro esfuerzo. ¿Cuándo empezaremos a hablar en Andalucía de medidas de largo alcance? Reindustrialización o energías renovables, nichos de mercado que generen empleos estables y de calidad en amplios sectores de población.
¿Y la solución es emprender? En el vídeo, Banderas compara al universitario americano con el andaluz. Emprendedores Vs gente que no se la juega. ¿Es justa esta comparación? Podemos ir a internet y consultar cuánto cuesta estudiar en una universidad de Estados Unidos: 20000 dólares de media al año (en la pública). Parece claro que estamos ante un perfil distinto, estudiantes de familias de alto poder adquisitivo que tendrán más fácil emprender. Porque para emprender hace falta dinero, que a veces se nos olvida.
Necesitamos tejer lazos de solidaridad. Superar el individualismo que nos arrincona y nos separa. Unirnos en asociaciones, comunidades, partidos, para que nuestro mensaje llegue más lejos. Y no permitir que nos hagan sentir culpables de esta situación. Se puede hacer, los pensionistas y el movimiento feminista han demostrado que es posible.
