En Argentina la frase plata o mierda se utiliza para redoblar la apuesta cuando uno está en las últimas, o se recupera y se gana o se pierde todo… y es una frase que bien puede sintetizar lo enunciado por el Presidente Javier Milei en la apertura del período de sesiones ordinarias del Congreso Nacional el pasado viernes en la noche.
Milei volvió a ser el Milei que irrumpió hace poco tiempo en la escena política nacional y expuso duramente cuál es su idea de gobierno para los tiempos venideros. Retomando su discurso anticasta, que enumeró en un paquete de ‘leyes anticasta’, y promovedor del Estado mínimo, Milei desafió a la oposición afirmando que en caso de no apoyar su gobierno y, según su criterio, poner palos en la rueda, él estaba dispuesto a aceptar el convite. ‘Si lo que buscan es el conflicto, conflicto tendrán’, les espetó.
Y paso seguido expuso su propuesta estrella, la convocatoria a la firma de un ‘Pacto de Mayo’, que lejos está de ser un verdadero acuerdo político y se asemeja mucho más a la sumisión de los diversos proyectos políticos tras el proyecto presidencial. La propia página web de la Presidencia lo sintetiza afirmando ‘La firma conjunta del llamado “Pacto de Mayo” estará sujeta a la aprobación de la “Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” y un nuevo Pacto Fiscal.’
Las 10 propuestas enunciadas por el Presidente, y que no están sujetas a negociación, son:
1) Inviolabilidad de la propiedad privada;
2) Equilibrio fiscal innegociable;
3) Reducción del gasto público «a niveles históricos»;
4) Reforma tributaria;
5) Rediscutir la coparticipación federal de impuestos y «terminar para siempre con el modelo extorsivo actual»;
6) Compromiso en las provincias de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país;
7) Reforma laboral moderna para promover el trabajo formal;
8) Reforma previsional «que dé sustentabilidad al sistema, respete a quienes aportaron y permita a quienes prefieran suscribirse a un sistema privado de jubilación»;
9) Reforma política estructural;
10) Apertura del comercio internacional.
Si los gobiernos provinciales quieren poder garantizar su viabilidad a futuro, algo que debería ser parte del punto 6, deben apoyar y aprobar los 10 puntos y los proyectos que enviará Milei al Congreso, caso contrario, y siguiendo las citas bíblicas a las que Milei es tan afecto, les tocará atravesar el desierto.
Afirmó Milei que la mayoría del pueblo argentino ‘puso en la Presidencia a un hombre recién llegado a la vida política, que conduce una fuerza política nueva, que puede no tener mayorías parlamentarias, ni intendentes, ni gobernadores, pero que sabe lo que tiene que hacer, sabe cómo hacerlo y tiene la convicción para hacerlo.’, y dejó en claro que ‘No negociamos el cambio y vamos a cumplir la promesa que le hicimos a la sociedad, con o sin el apoyo de la dirigencia política. Lo haremos con las herramientas que nos puedan brindar o lo haremos únicamente con los resortes legales del Poder Ejecutivo, como venimos haciendo hasta ahora. Porque nosotros cuando nos encontramos con un obstáculo, no vamos a dar marcha atrás, vamos a seguir acelerando.’
Hasta tuvo el cinismo de afirmar, cuando se refirió al accionar del Estado nacional durante la pandemia, que ‘si se hubieran hecho las cosas como un país mediocre la cifra de muertes por el covid-19 deberían haber sido 30.000 muertos…’ de verdad, en referencia a la cantidad de muertos con la que históricamente se referencia a las víctimas de la última dictadura militar.
Volvió Milei y volvió recargado. Parafraseando a Cristina Fernández, de quien dijo ‘ha sido responsable de uno de los peores gobiernos de la historia’, va por todo.
Plata o mierda, el problema es que si es plata es para pocos y si es mierda es para casi todos.
NOTA: El texto completo del discurso presidencial se puede consultar en https://drive.google.com/file/d/1BhvTN1PhGfXzt6KNRzXp-s5NsksnR-Ya/view
