La sequía está aquí de nuevo en buena parte del territorio nacional desde hace ya más de un año, pero especialmente en zonas geográficas prácticamente endémicas a este mal climático que, con periodicidad cada vez más constreñida, aparece y pone a prueba la capacidad de nuestros sistemas de almacenamiento y tratamiento del agua. Sevilla y su área metropolitana son expertas en estas directrices, por evidentes motivos de localización geográfica. Al estar situadas en una zona altamente vulnerable al cambio climático existente y de forma especial a los periodos de sequía, la provincia sevillana y su capital tienen experiencia en la aparición periódica y sistemática de la falta de agua, tan necesaria para nuestros cultivos y el mantenimientos de nuestros municipios y ciudades.
No por casualidad Sevilla es la primera ciudad en España declarada en Estado de Emergencia Climática. La escasez de lluvias ha reducido el volumen de agua embalsada, con una activación de prealerta por sequía que no han logrado paliar las últimas lluvias.
Emasesa, la Empresa pública Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas, gestiona el ciclo integral del agua en Sevilla y su entorno metropolitano, y se ha puesto como objetivo prioritario contribuir a transformar esta realidad mediante una gestión más eficiente del ciclo integral del agua para garantizar un suministro presente y futuro de igual calidad y cantidad que hasta ahora. Para ello es fundamental que la ciudadanía siga colaborando, porque ha llegado el momento del cambio, ha llegado el denominado ‘Objetivo 90’
En el primer año de la pandemia mundial de covid-19, 2020, el consumo medio de agua fue de 116 litros por habitante y día. El objetivo marcado por Emasesa a largo plazo es reducir este consumo a 90 litros por persona. Por ello reclama a la ciudadanía a través de esta campaña de concienciación para que entre todos y todas se sitúe a Sevilla y su área metropolitana en un referente en el uso racional del agua y conciencia medioambiental. Con la colaboración colectiva y el esfuerzo común en infraestructuras y tecnología, Emasesa está convencida de que se puede alcanzar este reto, o al menos intentarlo, porque, en definitiva, lograrlo repercutiría positivamente en toda la ciudadanía en general y en el bienestar de la ciudad y su área metropolitana.
