sábado, 4mayo, 2024
26.7 C
Seville

Varapalo de la ONU a la traición de Pedro Sánchez respecto al Sahara

La ONU ha afirmado que el conflicto del Sáhara Occidental debe resolverse dentro de los parámetros marcados por la legalidad internacional

José Antonio Gómez
José Antonio Gómez
Director de Diario16. Escritor y analista político. Autor de los ensayos políticos "Gobernar es repartir dolor", "Regeneración", "El líder que marchitó a la Rosa", "IRPH: Operación de Estado" y de las novelas "Josaphat" y "El futuro nos espera".
- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

Pedro Sánchez no sabe lo que ha hecho con su decisión de aceptar las reivindicaciones de Marruecos sobre el modelo de solución del problema del Sáhara Occidental. Tras recibir el rechazo de sus socios de gobierno, tras generarse una polémica interna entre la militancia del PSOE que se ha sentido decepcionada por el abandono de una de las luchas ideológicas del partido y, sobre todo, tras unirse el reproche de la ciudadanía, tanto de derechas como de izquierdas, ahora ha sido Naciones Unidas la que le ha cantado las cuarenta al presidente español.

En concreto, la ONU ha afirmado que el conflicto del Sáhara Occidental debe resolverse dentro de los parámetros marcados por la legalidad internacional y la solución que propone Marruecos de una autonomía a la carta, a la que se ha sumado como un fanático Pedro Sánchez, es contraria a lo estipulado por Naciones Unidas.

Sánchez, por cubrir sus intereses personales y políticos, se ha olvidado de las responsabilidades que tiene España respecto al Sáhara desde su posición de única potencia administradora del territorio.

El presidente español, en su afán por conseguir la aquiescencia y las caricias en el hombro de Estados Unidos, también se ha olvidado de que es la ONU la que lidera la solución y que las resoluciones del Consejo de Seguridad prevén el reconocimiento del derecho de autodeterminación del pueblo saharaui.

Sin embargo, España, con su declaración unilateral, pone piedras en el camino hacia la única solución que hay para este conflicto: la autodeterminación, la independencia y el reconocimiento de la República Árabe Saharaui Democrática como Estado. Para ello el pueblo saharaui, y solo el pueblo saharaui, debe decidir en un referéndum. Marruecos no se puede interponer ni asimilar competencias en la administración del territorio.

El precio pagado por una foto en el Despacho Oval

«París bien vale una misa». Esta expresión fue atribuida a Enrique de Borbón, el hugonote que eligió convertirse al catolicismo para poder reinar en Francia. En el caso de Pedro Sánchez, este adagio puede ser transformado en «La Casa Blanca bien vale una traición» porque, en el fondo, de eso es de lo que se trata, que el presidente del Gobierno de España sea recibido por Joe Biden y que el «líder máximo» pueda meter en su book la foto con el presidente de los Estados Unidos.

Sánchez ha rendido España a Marruecos y la única causa está en la obsesión del presidente español con ser recibido por el norteamericano. No hay otra razón. Las excusas dadas en el argumentario, tanto de la parte socialista del Ejecutivo, como del Partido Socialista (ya Partido Sanchista), de que se trata de una decisión que fortalecerá las relaciones con Marruecos no se las cree nadie.

El orgullo, o el ego, de Pedro Sánchez está herido porque Biden aún no le ha recibido, más allá del ridículo asalto en la Cumbre de la OTAN en el que el presidente de España parecía más un comercial de una ONG en el Metro de Madrid (con todo el respeto a esos trabajadores) que el máximo representante de los españoles. Fue algo vergonzoso.

No obstante, el orgullo de Sánchez sufrió otros dos varapalos más tras sus dos visitas a Estados Unidos en las que Biden tampoco le recibió.

Ahí está una de las claves para entender la rendición de España ante Marruecos en el tema del Sáhara Occidental: la necesidad de ser recibido en la Casa Blanca porque, no lo olvidemos, Biden sí que se ha reunido con otros presidentes de países, en teoría, con menor caché internacional.

El regalo de Sánchez a Marruecos es el precio pagado por una foto en el Despacho Oval. Esto es muy grave y la demostración de que ni España ni el pueblo español merecen el sufrimiento que este presidente está provocando.

- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

2 COMENTARIOS

  1. Si esa foto en el despacho oval le merece la destitución de presidente, puede que le valga la pena. Me adhiero a la pregunta: Ucraïna si y La República democrática Saharaui no? ¿Por qué? ¿Por que hemos de ver más preferencia a un País europeo que a una provincia española? Al fin y al cabo estos son compatriotas: ¿Qué dice su DNI? Puede que UP haya finalizado su camino con la derecha.

  2. – No cesa de llover.
    Lleva lloviendo tres semanas.
    Dan ganas de quejarse como Sarah:
    “– ¡Esto parece más surf que patinar! Podría dejar de llover por una vez”.
    Y que alguien como Eric Draven nos responda también, con tristeza y esperanza:
    “–No llueve eternamente”.
    El Romanticismo y su feroz existencialismo murió devorado por la vulgar y cobarde sonrisa cultivada en el buen y manso ciudadano. Y de alguna forma hay que recrearlo para que el coraje no sea devorado por la cobardía.
    No ha habido en la historia de la humanidad causa alguna de optimismo que justifique la sonrisa mansa, el frívolo y artificioso optimismo como el que hoy inunda la decadente sociedad para conjurar sus miedos ignorantes.
    Todo comenzó con la banal y caníbal sonrisa optimista de los que han pervertido la historia y la nobleza hasta hacerla mierda: reyes, políticos y sacerdotes de cualquier pelaje.
    (Entrecomillado, diálogo de El Cuervo, 1994)

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
Advertisement
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído