Lorena Liaño es una escritora absolutamente recomendable para prácticamente todos los públicos, y escucharla leyendo sus propios textos es un verdadero espectáculo. Lo sé por experiencia porque cuando empezaba su andadura literaria estuvo conmigo en el Taller3Estaciones, y la ha escuchado leer muchas veces, siempre con gran placer.
Hace unos meses presentó su nueva novela: LAS CUATRO GIOCONDAS. Siento especial afecto por esa novela, la he visto nacer, crecer cambiar y seguir creciendo hasta alcanzar una estatura imponente.
Se trata una historia absolutamente moderna, de cómo es la amistad entre las mujeres en nuestro tiempo, que además lanzs al pasado un ancla para rescatar a la mítica Gioconda pintada por Leonardo da Vinci.
Ingeniosa, divertida y mordaz, provocadora y también valiente, especialmente en los pasajes sobre el Club Secreto alrededor del cual se vertebra la novela que alcanzan unos niveles de morbo e imaginación fascinantes.
Con su primer libro, APRENDIENDO A SER FERNANDO, Liaño liquidó en un muy breve periodo de tiempo nada menos que cuatro ediciones.
El segundo, SABORES, que pivota sobre una escuela de cocina y en el que desarrolla a su personaje fetiche, Fernando, que ya protagonizaba su primera obra, fue también un éxito.
Con NO SIEMPRE ES TARDE, su tercer libro, Lorena Liaño fue finalista del
Ateneo Joven de Sevilla.
Y ahora con LAS CUATRO GIOCONDAS será una de las protagonistas de OCTUBRE NEGRO en Madrid.
El suma, una autora que merece la pena descubrir; antes o después los ojeadores de los grandes grupos editoriales la señalarán con el dedo y se convertirá en una estrella. Tiene todos los requisitos: es una persona encantadora y atractiva, escribe muy bien, es ingeniosa e imaginativa, y además es mujer (y por lo tanto misterio), como la inolvidable Gioconda de da Vinci.
(Mecanografía: MDFM)
