Indudablemente el partido en la final de Wimbledon 2022 le vino grande a Nick Kirgios. En el primer set demostró que tenía capacidad para ganar a Djokovic, pero estaba en La Central de Wimbledon y en una final a la que había llegado SALTÁNDOSE UNA ETAPA, que probablemente era la más difícil: DERROTAR A NADAL.
Desde nuestro punto de vista una de las mejores bazas de Kirgios es que lucha -juega al tenis- desde la frontera de la locura. Es falso que llegue a traspasar esa frontera, pero la pisa todo el tiempo y eso le permite una libertad de movimientos insólita que a él le da alas y desconcierta a sus rivales.
Decía Robert Carretero, el excelente comentarista de #Vamos, que si Kyrgios no derrotaba a Djokovic su participación en la final de Wimbledon tendría solo un peso relativo.
Es inevitable preguntarse si Kirgios habría podido derrotar a Nadal.
Pensamos que no, que Nadal estaba igual de motivado que Djokovic, o incluso más, y que quería ganar Wimbledon a cualquier precio porque se le agota el tiempo y su sueño es mantenerse como el tenista que más Grand Slam ha ganado de la historia.
Y a ello hay que añadir la extraordinaria maestría de Rafael Nadal en los puntos largos, que son precisamente el tipo de juego donde el peculiar e interesante jugador australiano menos brilla.
Quizá también le habría ganado algún set Kirgios a Rafa, como a Djokovic, pero nuestra sensación es que no habría podido con Nadal.
Y también nuestra sensación es que si Nadal hubiese jugado esa final con Djokovic el partido habría sido absolutamente inolvidable.
Naturalmente -somos españoles- queremos creer que Rafa habría ganado al campeón serbio.
Sí, estamos seguros de que en verdad habría sido así.
Forza Nadal.
Tigre Tigre