La presidencia sueca es la última del trío de presidencias actual, después de Francia y la República Checa, y marca el último capítulo del programa presidencial común de 18 meses . Pero cada presidencia también tiene sus propias prioridades.
Las cuatro prioridades de la presidencia sueca son la seguridad y unidad; resiliencia y competitividad; prosperidad y transición verde y energética, y valores democráticos y estado de derecho.
Qué esperan los eurodiputados suecos de la presidencia
La energía es un reto importante para los eurodiputados. Tomas Tobé (EPP) dice que la seguridad y la energía serán temas clave durante la presidencia sueca. “Necesitamos mantener a Europa unida y aumentar nuestro apoyo a Ucrania para abordar la situación de la política de seguridad”.
También tiene grandes expectativas de que Suecia hará que la UE sea más competitiva. “Debe haber una agenda clara de la UE para aumentar la competitividad, fortalecer el crecimiento y aumentar el comercio. Suecia debería utilizar la presidencia para avanzar en esta dirección. Para ello, será importante más acción para combatir el crimen organizado, así como avanzar con el Pacto Migratorio”.
Dudas sobre el gobierno sueco de centroderecha
Helene Fritzon (S&D) afirma que la democracia, el clima y la igualdad son áreas en las que Suecia tradicionalmente tiene una gran reputación, pero que tiene dudas sobre el gobierno sueco de centroderecha recién elegido, en particular en tiempos de crisis y guerra en Europa.
“Exige un liderazgo con valentía política y responsabilidad de futuro. Estoy muy preocupado por cómo el gobierno conservador estará a la altura de esto. Las políticas sobre el clima y la igualdad ya han sido desmanteladas y los temas de democracia han perdido prioridad”, dice, y agrega: “Me gustaría ver a la UE a la cabeza de una transición verde y justa”.
Clima, energía y migración: los temas más importantes durante la presidencia
Por su parte, Abir Al-Sahlani (Renovar) tiene grandes esperanzas de que la presidencia sueca defienda el estado de derecho, la transparencia y el liberalismo económico.
“Que aseguren que la UE tenga una voz fuerte en el mundo, al mismo tiempo que contribuyen a un animado debate de la UE, donde se impulsa la cobertura mediática de los asuntos de la UE”, comenta. Al-Sahlani explica que el clima, la energía y la migración serán los temas más importantes durante la presidencia: «La política migratoria restrictiva del gobierno a nivel nacional es una señal de alerta, por decir lo menos».
Bajas expectativas de los Verdes/ALE
Quien tiene bajas expectativas sobre la presidencia sueca de la Unión Europea es Alice Kuhnke (Verdes/ALE).
«El gobierno sueco ya ha reducido sus ambiciones para hacer frente a la crisis climática… No tenemos tiempo para esperar, la crisis climática está aquí y ahora y es por eso que la presidencia sueca debería contribuir a aumentar significativamente las ambiciones de la UE”.
Cambiar las reglas de financiación de la UE «para que no favorezcan a los islamistas»
En palabras de Charlie Weimers (ECR), además de fortalecer la competitividad y aumentar el comercio, le gustaría que la presidencia continuara el trabajo de los franceses y checos en normas de financiación de la UE más estrictas.
“Sabemos que la UE nunca aprobaría dar millones a organizaciones de extrema derecha cuyos líderes han hecho declaraciones antisemitas, misóginas u homófobas. Desafortunadamente, eso no se aplica a todos los extremismos. Cambiar las reglas de financiación de la UE para que no favorezcan a los islamistas debería ser un objetivo importante para la presidencia sueca”.
La izquierda desesperanzada
Preocupación es lo que ha expresado Malin Björk (la izquierda) por el hecho de que el nuevo gobierno tome el liderazgo de la UE.
“Conozco a muchos que, al igual que yo se sienten preocupados de que Suecia ahora asuma la presidencia de la UE. Pero espero que me sorprenda y se defienda claramente de la democracia y el estado de derecho en países como Polonia y Hungría, y trabaje por una política climática ambiciosa y una política migratoria humana”.
España asumirá la presidencia de la UE en la segunda mitad de 2023, formando el próximo trío de presidencias con Bélgica y Hungría.
