Bidafarma es una cooperativa andaluza de distribución mayorista de medicamentos de amplia gama, con implantación nacional, de capital totalmente farmacéutico y con sede en Málaga, resultado de la fusión de 12 cooperativas. El pasado noviembre presentó públicamente su fundación, presidida por Leandro Martínez Carrasco y cuya gerencia está dirigida por Manuela Villena López, esposa del presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla. Dos consejeras de su equipo de gobierno, la de Salud y Consumo, Catalina García, y la de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, además del viceconsejero de Salud, Miguel Ángel Guzmán, y el delegado territorial en Málaga de la Junta, Carlos Bautista, se han volcado en arropar este martes 27 de junio la segunda presentación en siete meses de esta fundación farmacéutica que dirige la esposa del presidente andaluz. Pese a este fuerte apoyo institucional de la Junta, la Administración autonómica y la Fundación Bidafarma no poseen en la actualidad ningún acuerdo de colaboración, según han confirmado a este diario fuentes de la Consejería de Salud.
Esta distribuidora farmacéutica tiene más de 1.500 trabajadores en plantilla y posee almacenes de distribución repartidos por todo el país y su implantación se extiende por 12 comunidades autónomas, entre ellas, Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Castilla y León y Galicia. El pasado 2022, Bidafarma facturó 2.712 millones de euros y alcanzó una cuota de mercado del 22,12%, lo que supone un crecimiento del 0,39%, convirtiéndose de este modo en la cooperativa de distribución farmacéutica que mayor aumento en cuota de mercado ha experimentado en el último año.
Bidafarma facturó 2.712 millones de euros en 2022 y alcanzó una cuota de mercado del 22,12%, con un crecimiento del 0,39%, el mayor aumento en cuota de mercado registrado en el último año.
Durante la pasada pandemia, Bidafarma y el Gobierno de Moreno Bonilla acordaron en diciembre de 2020 que la distribuidora andaluza con sede en Málaga se encargaría de la gestión logística de las vacunas contra la Covid-19.
Bidafarma asegura que su fundación se asienta en tres pilares fundamentales: iniciativas solidarias con los colectivos más desfavorecidos, apoyo académico a instituciones del sector farmacéutico y científico y una firme orientación a la sostenibilidad medioambiental, actividades que se desarrollarán tanto en territorio nacional como en otros países.
Durante la primera presentación de esta fundación hace siete meses, el presidente de la distribuidora farmacéutica, Antonio Mingorance, aseguró que “desde la Fundación se realizarán actividades que promuevan la labor farmacéutica, faciliten el acceso a la población a tratamientos y productos farmacéuticos y fomenten la responsabilidad social de la cooperativa”.
