HipocresIA

¿Qué diferencia ética hay entre que un responsable de recursos humanos rechace tu candidatura a un empleo, o lo haga un algoritmo analizando cientos de datos para llegar a la misma conclusión? 

¿Te acuerdas dónde estabas hace 3 años? En tu casa, ¡en pleno confinamiento! Y un año después, estabas recibiendo una vacuna, que te devolvió la libertad. ¿Sabes, cómo se desarrolló esa vacuna? ¡Con inteligencia Artificial! 

Esta semana, Sam Altman el CEO de la “ONG” que ha puesto patas arriba el tablero geoestratégico mundial, pedía a La Casa Blanca que regulará la inteligencia artificial por si en un futuro ayudará a la extinción de la humanidad. A la par, que plantea una renta básica universal para cada humano a cambio de robarle el alma, sí, tan solo, tienes que dejarte escanear el iris del ojo por su startup WorldCoin, para asegurar que eres humano analógico y no un bot. Mira a la entrada de tu centro comercial, porque hay algunos en la España de la privacidad y la ética. 

Resulta que a través de la iridología nuestro sistema endocrino muestra enfermedades, problemas físicos, cicatrices que hemos tenido en el pasado. Vamos, ¡La panacea para las aseguradoras! Cada día más sustitutivos de nuestra sanidad pública que facilitamos destrozarla. En WorldCoin perjuran que cuidan tu privacidad, pero como sea la mismo que la versión gratuita de Chat GPT… el producto eres tú. 

¿Será como la regulación que aprobó Obama para las farmacéuticas? Las cuales, se blanquearon así antes sus ciudadanos, pero trasladaron sus laboratorios a países con leyes más laxas. La semana pasada, Sam se paseó por Madrid, y esperó a estar en Londrés para decir que si la UE le presionaba mucho, se plantearía sacar ChatGPT de Europa. Como hizo en Italia. 

Curioso que hiciera la petición unos días antes del encuentro entre Margrethe Vestager, la vicepresidenta de la Unión Europea; Antony Blinken, secretario de Estado de EEUU con representantes de la industria y la sociedad civil, en el IV Encuentro del Consejo de Comercio y Tecnología EU-EEUU (TTC), donde solo hubo tibias palabras como crear un código voluntario de buenas prácticas sobre el uso de la IA, extensivo al G7 que se acaba de reunir en Hiroshima y seguramente al G20. 

La posibilidad de que una inteligencia artificial sea más inteligente que los humanos, queda de manifiesto ante el Brexit, o nuestra forma de elegir alcaldes el domingo pasado en nuestra partidocracia. En el caso de que votaras, ¿lo hiciste auditando los fríos datos del programa de las candidaturas y la gestión en las alcaldías? O como hicimos la mayoría, ¿votaste en base a un relato para que otros no gobernaran? También, puedes ser parte de esas 750.000 personas de izquierdas que se enrabietaron y se quedaron en casa al no cumplirse todas sus expectativas, o las personas que votaron a infantiles egos andantes incapaces de volver a presentarse en coalición, y no obtener el mínimo del 5% regalando alcaldías a otros. Es decir, es la gente a la izquierda del PSOE quién le da el poder a los conservadores. Quizás, para justificar su binaria existencia y echar la culpa a los demás.

Como las decisiones son emocionales, y en España es legal mentir en campaña electoral, ¡relato mato dato! Ojo a la que se viene 5 días después de la efeméride del alzamiento nacional, ¿lo habrá elegido Pedro aposta? 

Escribo partidocracia, porque no solo un ser humano no es un voto, o que un voto de un habitante de la isla de la Gomera vale por 10 habitantes de Gran Canaria, o por la ausencia de listas abiertas, si no, lo más sangrante, es que en 2024 volverá a haber elecciones europeas, pero no podrás votar directamente ni a la presidencia de la comisión europea (Ursula Von der Leyen) al elegirla el europarlamento, ni a nadie de la Comisión Europea, al ser cada Estado miembro quien propone a un comisario. Aunque debas atar sus directivas. 

Supuestamente, en nombre de la blanqueadora ética (que racista es nuestro lenguaje), hay lobistas alarmando sobre la posible deshumanización, al poder haber inteligencias no humanas que tomen decisiones en base al anaĺisis científico de millones de datos, en vez del sesgo de confirmación de los relatos que tanto nos encantan aderezados con neuromarketing a los sobre formados europeos. 

Pues, ¿qué quieres que te diga? Para, que me bajo de tanta hipocresía. 

Sinceramente, y en nombre de la ética de este planeta que nos cobija, donde los animales tan solo somos el 0,3%  de la biomasa terrestre y el 99,7% son plantas. Con gusto votaría o ayudaré a la validación de una inteligencia no humana que nos relegue a seres sin capacidad no ya de seguir destrozando el planeta con el cambio climático, si no, de masacrarnos los unos a los otros, por el afán de poder de líderes que en muchos casos elegimos partidocraciamente, cómo llegó al poder Hitler en 1933 en Alemania. Y repetimos , a base de populismo sin fronteras y con Putin o el líder supremo chino o Meloni.

Sí, somos esa especie que provoca que cada 5 segundos un niño o niña se vea obligado a huir de su hogar debido a un conflicto, en todo el mundo, ¡449 millones viven en zonas de conflicto entre humanos! Sí, solo es un irrisorio 5 ‘6 % de la población del planeta, según Save The Children. 2 millones más que todos los habitantes de la ética Unión Europea que velamos desde el sillón por la felicidad del resto del planeta, sobre todo en Navidad. 

Ya hay inteligencias artificiales colectivas para poder decidir aglutinando el voto de los 8.000 millones de humanos, acciones para la sostenibilidad (económica, social) de la humanidad, donde una persona analógica sea un voto, sin ponderaciones tipo, G7, G20 o zombies como la ONU, la UNESCO, OMS… 

¡Democracia global ya!

Aunque eso pueda suponer la eliminación de la seguridad de la que disfruto por haber nacido, esta vez, dentro del viejo imperio europeo, y me permite escribir esto sin que mi vida analógica corra peligro. Si los europeos somos tan éticos, ¿por qué no dejamos de mentorizar a los 7.553 millones de humanos restantes, ¿son inferiores? O Quizás, les tenemos en trabajos más físicos, confeccionando nuestra ultra barata ropa, para que no tengan tanto tiempo de ocio como en Europa, para pensar cómo mejorar su bienestar sin aspirar a imitarnos.

Quizás, los europeos deberíamos usar la IA para detectar el don innato con el que nace cada ser, y se materializa en talentos, para entrenarlos en el colegio, y así realizarnos aportando a la comunidad, sin la necesidad de inmiscuirnos en la vida de los demás. como publiqué hace un par de semanas.

Por último, el próximo 5 de junio, día mundial del medio ambiente, espero que los de la manzana muestren un poco cómo están usando la optogenética, ahora que Neurolink tiene permiso para implantar chips en los cerebros de los humanos, para comprender la magia que la neurociencia no es capaz de descifrar. 

GO!