Esta mañana conocíamos la triste noticia del asesinato de 24 civiles en un atentado que también ha dejado a 36 personas heridas de gravedad. Fueron atacadas cuando se encontraban en un convoy de refugiados.
A pesar de que los medios occidentales en la mayoría de los casos han asegurado esta mañana que la autoría era de las tropas rusas, Vladimir Rogov, uno de los responsables de la zona, ha asegurado que el ataque se ha realizado por parte de las tropas ucranianas.
Rogov ha escrito en su propio canal de Telegram que el ataque tuvo como objetivo un convoy de automóviles que viajaba desde el territorio controlado por Ucrania hacia la región de Zaporiyia, que acaba de firmar su anexión a la Federación Rusa.
«Ocurrió en la carretera de Orekhovskoe donde se están formando convoyes para entrar en la región», ha afirado Rogov. «24 personas, incluidos 11 hombres y 13 mujeres han muerto. 36 han resultado heridas, incluyendo a un niño», ha añadido.
Según Rogov, las personas que han sido atacadas, han tenido dificultades a lo largo de la semana para poder acceder a Zaporiyia, siendo bloqueados por tropas ucranianas. «Después de esto, el Servicio de Seguridad Ucraniana y la policía se acercaron a ellos, les amenazaron abiertamente y les dijeron que se arrepentirían de lo que estaban haciendo».
El jefe de la administración de Zaporiyia ha acusado al presidente ucraniano, Zeleneksiy, de «intentar vengarse de los residentes de la región de Zaporiyia después de que decidieran unirse a Rusia durante el referéndum».
Además, Rogov manifiesta estar convencido de que este ataque se ha perpetrado y organizado para acusar a Rusia de haberlo cometido.
