Tan sólo el 30,9% de las y los técnicos superiores sanitarios estima que su nivel de cualificación profesional está acorde con su titulación académica, y el 90,6% cree necesario que, por sus capacidades, la formación reglada debería ser un Grado universitario. Así se desprende del estudio elaborado por la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO (FSS-CCOO), tras realizar y analizar alrededor de 1.500 encuestas realizadas en centros públicos del Sistema Nacional de Salud (SNS).
“Ni mucho menos la formación reglada atiende a las necesidades de los profesionales sanitarios. La formación debe pasar a las universidades, como se está haciendo en otro países de Europa. Los técnicos tienen problemas para poder trabajar porque no tienen la formación suficiente”, ha expresado el responsable de Negociación Colectiva FSS-CCOO, Jesús Cabrera, durante la presentación del estudio.
Los técnicos superiores sanitarios reivindican un grado universitario
Esta es una de las principales reivindicaciones del informe, que recoge además de las conclusiones obtenidas con las encuestas, propuestas sindicales encaminadas a paliar las necesidades de este colectivo.
“No tenemos la formación necesaria para poder ejercer las funciones que se nos asignan. Debemos tener en cuenta la evolución tecnológica actual que existe en la sanidad, algo que no se contempla en nuestra formación. Lo que pedimos es que nos equiparen con el resto de los países de la Unión Europea, donde la formación de un técnico superior es un grado universitario”, ha reivindicado Andrés Gámez, técnico superior en un hospital público de Madrid.
El estudio llevado a cabo por la FSS-CCOO recoge entre sus conclusiones que la formación profesional es insuficiente, pues tan sólo un 12% de las personas encuestadas la estiman adecuada y un 17,8% puede participar en sesiones formativas con facilidad en su horario de trabajo. Premisa que se refuerza al analizar que siete de cada diez de estas profesionales considera que su nivel de cualificación profesional no está acorde con su titulación académica, y que el 90,6% defiende que por sus capacidades la formación reglada debería ser un Grado universitario.
Competencias
Asimismo, el informe recoge que en el colectivo de técnicos/as superiores sanitarios existe una preocupación extendida por la definición de sus competencias y por los conflictos de convivencia funcional con otras categorías. En concreto, el 50,2% considera que sus funciones no están suficientemente definidas, y en ocasiones son realizadas por otras profesionales; el 36,2% denuncia que realizan otras labores que no son propias de su profesión por falta de personal en otras categorías, y el 43,4% se queja de dedicar más tiempo del necesario a trabajo administrativo.
“El desarrollo profesional de los técnicos superiores sanitarios no tiene nada que ver con el de la enfermería, gran parte de culpa de estos conflictos los tiene la Administración, que no sabe definir las tareas en cada categoría”, ha explicado Cabrera.
Los técnicos superiores sanitarios reivindican visibilidad
Se pone así de manifiesto en este análisis de CCOO que la principal reclamación de este conjunto de profesionales se refiere a la inadecuada formación que reciben para el desempeño de sus funciones, a la falta de reconocimiento y definición de sus funciones. Sin embargo, estas encuestas también revelan que las plantillas son insuficientes y los servicios no se refuerzan teniendo en cuenta las cargas de trabajo (el 67,3% de las personas encuestadas consideran que el número de técnicos sanitarios superiores en su servicio es insuficiente); perciben poca valoración de pacientes y familiares; o que las incidencias en las contrataciones y en la planificación de los turnos inciden en la conciliación de la vida laboral y familiar, etc.
Propuestas sindicales
El estudio recoge propuestas sindicales encaminadas a dar respuesta a las necesitades de este colectivo. Entre ellas, destaca la de aumentar la financiación de la sanidad pública, como mínimo, un 7,2 por ciento del PIB.
Además, reclaman culminar de forma inmediata el paso del colectivo al grupo B. “Lo que pedimos no es solo un tema cuantitativo. Llevamos más de 15 años esperando que las administraciones cumplan la ley y el artículo 76 sobre Clasificación Profesional del Estatuto Básico del Empleado Público para que los profesionales sanitarios queden en el grupo B y no en el grupo C”, según el secretario general FSS-CCOO, Humberto Muñoz.
«Hay que colocar a este colectivos en el grupo profesional que les corresponde», ha manifestado Muñoz, al tiempo que ha aclarado que primero hay que elevar el grupo de técnicos superiores al grupo B y luego pasar la formación de estos profesionales a un grado universitario».
Desconocimiento sobre la profesión
Otra de las reivindicaciones de los técnicos superiores sanitarios ha sido el poco conocimiento y valoración sobre su trabajo. “Nos confunde con enfermeras o auxiliares, la gente no sabe qué hacemos”, ha indicado Andrés Gámez.
“Realizamos la mayoría de las pruebas diagnósticas para los pacientes. Si nosotros no estamos, la sanidad no funciona en España”, ha asegurado Gámez junto a sus compañeros de profesión.
Por eso han explicado que las labores que realizan son muy diversas, “como análisis de sangre, radiografías, ecografías, mamografías, además de otras pruebas relacionadas con la nutrición e higiene dental”.
