En una marcada muestra de solidaridad y preocupación por la difícil situación de vivienda que enfrentan los trabajadores en Ibiza, Pepe Álvarez, el secretario general de UGT, ha llevado a cabo una visita a un campamento de trabajadores en la isla. Estas personas, a pesar de tener contratos indefinidos y pertenecer a diversos sectores laborales con salarios promedio, se han visto forzados a vivir en tiendas de campaña o incluso a la intemperie debido a la falta de opciones habitacionales asequibles.
Esta visita se enmarca dentro de la asamblea de delegados y delegadas del sindicato, que ha tenido lugar en la isla. Durante su visita, Pepe Álvarez ha expresado con vehemencia la necesidad imperante de «garantizar una vivienda digna para los empleados», considerando la inaceptable falta de oferta de viviendas. Álvarez lamentó la situación al decir: «Me siento avergonzado de pertenecer a un país donde se permiten este tipo de situaciones. En este campamento, el ayuntamiento de Sant Josep incluso ha cortado el suministro de agua. Es una realidad indignante».
En una conversación con los medios, Pepe Álvarez enfatizó que el acceso a la vivienda para las personas trabajadoras está experimentando dificultades excepcionales, exacerbadas por la proliferación de viviendas destinadas al turismo y los salarios insuficientes. Según Álvarez, las subvenciones de la Unión Europea destinadas a la resiliencia y la transición ecológica, junto con el modelo de turismo regenerativo, deberían ser aprovechadas para crear planes de viviendas sociales que aborden de raíz este problema creciente.
El líder sindical hizo un llamamiento urgente a la acción gubernamental, ya que esta problemática no solo se limita a Ibiza, sino que también afecta a otras islas, siendo más crítica en Ibiza y Formentera. Álvarez argumentó que este es un tema de derechos humanos que requiere una intervención inmediata.
Además de plantear el problema, Álvarez presentó varias propuestas que UGT considera esenciales para abordar esta crisis. Entre estas propuestas se destacan la promoción de reservas mínimas de viviendas de nueva construcción para satisfacer necesidades temporales de alojamiento, el aumento de la reserva de habitaciones de hotel para trabajadores que se desplazan durante periodos de alta demanda, la aplicación y adaptación de leyes de vivienda en zonas turísticas para controlar los precios del alquiler y la implementación de inspecciones rigurosas en alojamientos turísticos para estimular la disponibilidad de viviendas en alquiler.
Con propuestas concretas sobre la mesa, es evidente que la problemática de la vivienda se ha convertido en una prioridad en la agenda de UGT y de la comunidad en general.
