Pese a que la Fiscalía está en contra de su decisión, el juez ha elevado al Tribunal Supremo el caso contra Carles Puigdemont, al que acusa de terrorismo por el fallecimiento de un ciudadano francés que se encontraba en el aeropuerto de El Prat en una terminal, mientras se producía una manifestación en otra.
El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón insiste en vincular a un fallecido por infarto en una terminal del Aeropuerto de El Prat por las protestas del Tsunami Democrático en 2019 pese a no dejar de recibir respuestas contrarias a esta hipótesis. La última ha sido de los Mossos d’Esquadra, que han informado al magistrado que en ninguno de los tres atestados confeccionados sobre los altercados organizados en los accesos al Aeropuerto en protesta contra la sentencia del procés se menciona a ninguna persona que sufriera un ataque al corazón.
Tras este nuevo revés, que se suma al que le propinó la Fiscalía al replicar con contundencia la imputación de Carles Puigdemont y el delito de terrorismo apreciado por el instructor, el juez García Castellón ha insistido en buscar cualquier elemento que le permita sustentar el vínculo del fallecido con la protesta de Tsunami, y ha solicitado a los juzgados de El Prat información sobre el fallecido.
En una providencia, el juez ha requerido a los juzgados de El Prat para que informen si en relación con el fallecimiento se abrió una causa a la vista de que los atestados aportados por la policía catalana carecen de información.
En una consulta efectuada por elDiario.es, el TSJC ha informado que no constan diligencias abiertas por los juzgados de El Prat, lo que implica que tampoco el juzgado de guardia apreció en 2019 una conexión entre la protesta y el fallecido, cosa que -por narices- el juez García Castellón aprecia cuatro años después.
En los atestados se detallan todos los sucesos de esa protesta y recogen imágenes de los servicios policiales, testigos policiales de ataques a los antidisturbios, informes médicos de agentes heridos, denuncias de Adif por los daños en el Aeropuerto e incluso a vehículos. Pero no citan ningún fallecido relacionado con las protestas.
La hipótesis que García Castellón ha planteado en plena negociaciones por la amnistía ya fue rechazada hace cuatro años, cuando se produjo el fallecimiento: el Servicio de Emergencias Médicas de Cataluña desvinculó la muerte del fallecido ya que este se encontraba en una terminal cuyos accesos no se encontraban bloqueados por los manifestantes y los sanitarios pudieron acudir con rapidez a atenderlo.
El Servicio de Emergencias Médicas desvincula la muerte de un ciudadano francés por las protestas, el hombre sufrió una parada cardiorrespiratoria en la Terminal 2 del aeropuerto. Los servicios médicos aseguran que las concentraciones no impidieron una atención inmediata y traslado en helicóptero del viajero, que falleció poco después en el hospital.
El juez no recogió en su auto la conclusión del SEM, pese a que fue una información ampliamente divulgada en todos los medios. En cambio, sí encargó a la Guardia Civil que informara sobre el fallecimiento de la persona y de su posible vinculación con el bloqueo de los accesos a El Prat con el objetivo de ofrecer a sus familiares ejercer la acusación del caso. En su informe sobre el caso, la Guardia Civil no hizo mención alguna al fallecido.
