Según el diccionario de la RAE, patriotismo es “amor a la patria” en su primera acepción y “sentimiento y conducta propios del patriota” en la segunda y ambas definiciones cobrarán todo el sentido cuando lean este artículo. Y es que ser patriota y por tanto, defender y amar a tu país, es lisa y llanamente querer lo mejor para todas las personas que viven en él.
Ser patriota es querer que a todos les vaya bien. A un anciano, a un niño, a un joven, a una mujer, a un terrateniente, a un albañil, a una camarera de piso, a una dependienta de una tienda de ropa, a un militar, a una agente de la Policía Nacional, a un ebanista, a un médico, a un enfermero, a una celadora, a un maestro, a una auxiliar de veterinaria, a un jubilado o una jubilada y así, podía seguir enumerando a todas y cada una de las personas que integran una sociedad. Y es que querer a tu país, implica querer el bien para todos y eso, algunos no lo entienden o al menos, eso se desprende de sus discursos políticos.
No se es más patriota llevando una bandera o un escudo en la solapa. No se es tampoco poniéndose firme al escuchar el himno o guardar silencio cuando éste suena. Eso se llama respeto y lo veo bien pero no es suficiente. No lo es porque desgraciadamente, de los símbolos no comemos ningún español aunque a decir verdad, tengo que dejar un recado aquí a los que van al desfile del 12 de octubre simplemente para silbar al Presidente del Gobierno si este es socialista y les diré que si quien está en el Palacio de la Moncloa es de este partido político, lo es por la voluntad de una mayoría de españoles o bien, porque ha suscitado el apoyo mayoritario de las fuerzas parlamentarias. Si alguien no sabe o no entiende lo que es el parlamentarismo y la democracia, llevamos con este sistema desde el año 1977 si cogemos la fecha del 15 de junio como la del inicio de un sistema donde los ciudadanos eligen libremente a los representantes de las distintas instituciones democráticas y ser un buen patriota, implica también ser un demócrata aceptando las reglas que nos dimos los españoles, en las cuales como en el deporte, hemos de asumir que unas veces ganan unos y otras, ganan otros coincidiendo con lo que nosotros hemos decidido o no. Y es que tanto si nos gusta como si no, hemos de aceptarlo.
«Ser patriota también implica aceptar que la ley es para todos, que la soberanía reside en todos y cada uno de los habitantes del país con derecho al voto»
Ser patriota también implica aceptar que la ley es para todos, que la soberanía reside en todos y cada uno de los habitantes del país con derecho al voto, derecho que tenemos absolutamente todos los españoles mayores de dieciocho años.
Un demócrata prefiere un sistema donde él o ella pueda decidir qué quiere para su municipio, para su comunidad autónoma, para su país o para su continente. Votas a una serie de representantes y les das la capacidad de elegir a la persona que se ponga al frente de un determinado gobierno. Bien, pues esta perorata que acabo de soltar tan de cajón, tan fácil de entender y tan sencilla que hasta un niño lo entiende, hay algunos que no es que no lo entiendan. No. Es que no lo quieren entender. Que no es lo mismo.
Patriotismo es luchar por lo mejor para todos: una Sanidad y una Educación pública, de calidad y universal, un sistema de pensiones público que garantice que una persona pueda cubrir sus necesidades básicas al llegar a su etapa de jubilación, una vivienda digna, un sueldo digno, un trabajo digno y derechos para todos, de manera que podamos vivir en igualdad y sobre todo, con dignidad.
«Siempre he apostado por una España que sea un proyecto común»
Siempre he apostado por una España que sea un proyecto común. Que sea la casa de todos y que, aún con nuestras diferencias, estemos unidos cuando la situación lo requiera. Eso es patriotismo. Por cierto, esto último que digo, se llama concordia y estaría bien que la practicáramos cada día de nuestra vida. Y no, no estoy pidiendo que nos desideologicemos. Lo que pido es que en situaciones extraordinarias, todos los españoles exijamos a nuestros representantes políticos que aparquen sus diferencias y trabajen en aquello que les une para llevar a buen puerto a nuestro país. Eso es patriotismo.
¿La renovación del Consejo General del Poder Judicial no es un tema importante para España? Seguro que si un español está inmerso en un proceso judicial y ve que éste se retrasa de manera indefinida porque falte personal en el juzgado que lleven esa causa, ¿acaso eso es de ser un buen patriota? ¿fastidiar la vida de un ciudadano o de una ciudadana de nuestro país que depende de un juicio para que su vida cambie a mejor, no es patriotismo? ¿bloquear ese órgano constitucional y por tanto, que esa persona tenga ese impedimento en su vida sí lo es?
La palabra patriotismo nos lleva a saber ser un buen ciudadano y para ello, debemos ser solidarios con los seres humanos sin distinguir raza, color, sexo ni nacionalidad porque si algo es España es que es parte del mundo y más en los tiempos actuales donde la globalización manda, aunque también está una Ciencia Humana que no se equivoca que es la Historia y es que si queremos ser buenos patriotas, hemos de tener buena memoria porque los inmigrantes de hoy son como esos españoles que se fueron a otros países en busca de trabajo porque aquí no lo tenían.
También es ser patriota cuando luchamos por una buena Sanidad Pública porque eso hará que un paciente con cáncer pueda tener a tiempo su tratamiento y le salve la vida, por ejemplo porque seas blanco, negro, amarillo, de Izquierdas o de Derechas, da lo mismo porque cualquiera puede pasar por cualquier enfermedad y además, si recurrimos a la Biblia (esa que utilizan a conveniencia a veces) habla Jesucristo del amor al prójimo, del saber perdonar y de ser valientes y decir que nadie puede tirar la primera piedra porque nadie en este mundo está libre de pecado o lo que es lo mismo: nadie es más que nadie ni tampoco menos. Eso también es patriotismo tanto que la igualdad entre españoles está reconocida por la Constitución que votaron una mayoría de compatriotas aquel seis de diciembre de mil novecientos setenta y ocho. Y reitero que para algunos puede que este artículo resulte una perogrullada pero es que parece que hay gente empeñada en ser constitucionalista a conveniencia e interés pero claro, quizás es que algunos les gusta ser españoles “a ratos” (palabra bien traída aquí creo que con acierto, ya me entienden…).
«Ser socialista es ser un servidor público que defiende la democracia desde un prisma social»
Y es que ser socialista o socialdemócrata (cojan el término que ustedes prefieran) es ser un servidor público que defiende la democracia desde un prisma social y que por tanto, va destinado a velar por los intereses de la sociedad y ésta somos todos y no unos pocos como algunos quieren que sea. Por esta razón, ser patriota y socialista no es algo que vaya por separado. Ni mucho menos y lo digo con orgullo primero por ser español y después por pertenecer a un partido que tiene más de ciento cuarenta y tres años de historia y que si los tiene es por una razón: ser socialista es buscar no ser importante en la sociedad, sino ser importante para la sociedad y por consiguiente, ser útil para el progreso de la misma.
Espero que muchos se sientan identificados con el concepto de patriotismo que he pretendido plasmar aquí.
Y es que ya lo dijo Borges: “Nadie es patria. Todos lo somos”.
