Hoy es el primer día en que se liberan los peajes de más de 550 nuevos kilómetros de autopistas situados entre Zaragoza y la costa Mediterránea y entre Francia y Tarragona, así como otros tramos que también discurren por Cataluña. Los conductores ya no tendrán que echarse la mano al bolsillo buscando monedas cuando se aproximen a los peajes ni tendrán que incluir una parte de los gastos del viaje para transitar por carreteras más rápidas y seguras.
Situación de desigualdad
La mayor parte de los kilómetros de autopistas que pasarán a ser gratuitos se encuentran en Cataluña, cae desde este momento uno de los argumentos de los independentistas catalanes que consideraban que tantos kilómetros de peaje de pago en Cataluña fomentaban una desigualdad económica respecto del resto de Comunidades Autónomas.
Tramos gratuitos
Concretamente se trata del tramo de la AP-2 entre Zaragoza y El Vendrell, en la provincia de Tarragona y que suponía un coste para los usuarios de 25,95 euros y del tramo de la AP-7 entre la frontera francesa y la ciudad de Tarragona que suponía a los conductores un gasto de 25,75 euros. Todos estos tramos pasarán a ser totalmente gratuitos hasta que se implante un nuevo sistema de tarifas en 2024.
Pedir perdón
Pero desde la Generalitat ponen más énfasis en el tiempo que se ha vivido una situación injusta que al fin de la misma. «Celebramos el fin de los peajes del Estado y compartimos la alegría, pero no daremos las gracias al Estado. Es el Estado el que debe pedirnos perdón por un expolio sostenido de casi 50 años sin que se haya construido prácticamente ningún autovía gratuita en Cataluña”, manifestaba a TV3 el vicepresidente de la Generalitat y conseller de Territori, Jordi Puigneró.
