La única central eléctrica en Gaza corre el riesgo de un apagón total, lo que intensificará la crisis humanitaria para más de 2.2 millones de habitantes de la región. La situación se deteriora mientras se desarrolla una intensa campaña de bombardeos, resultando en aproximadamente 1.350 muertos y más de 6.000 heridos.
Este reciente conflicto se intensificó después de un ataque el 7 de octubre por Hamás y otros grupos armados palestinos de Gaza. Esta ofensiva llevó al lanzamiento de cohetes y a ataques en el sur de Israel, con un saldo de más de 1.200 muertos y 2.700 heridos, muchos de los afectados son civiles.
El castigo colectivo de la población civil equivale a un crimen de guerra
Ante esta situación, Agnès Callamard de Amnistía Internacional declaró: «Las autoridades israelíes deben restablecer inmediatamente el suministro eléctrico de Gaza, levantar su bloqueo ilegal de 16 años y garantizar que se satisfacen las necesidades básicas de la población civil de Gaza. El castigo colectivo de la población civil equivale a un crimen de guerra; es cruel e inhumano.»
El apagón no sólo sumirá a Gaza en la oscuridad, sino que también cortará comunicaciones y acceso a Internet. Los servicios esenciales, como el suministro de agua potable, se verán gravemente afectados. Hospitales, ya de por sí en situaciones críticas, enfrentarán aún más desafíos, poniendo en riesgo a los pacientes, desde los recién nacidos hasta aquellos con enfermedades crónicas.
Una postura perturbadora es la de un ministro israelí, que declaró que el suministro de electricidad, agua y combustible no se restablecerá hasta que Hamás libere a los rehenes. Esta es una clara evidencia de que la población civil está siendo castigada por las acciones de grupos armados, a pesar de que no tienen relación directa o control sobre estas acciones.
Amnistía Internacional investiga varios ataques aéreos, incluidos aquellos que han resultado en la trágica pérdida de vidas civiles, incluidos niños
Callamard también añadió: «El hecho de que grupos armados palestinos cometan actos contra civiles israelíes no exime a Israel de sus obligaciones de proteger a los civiles. La venganza colectiva no hace justicia a las víctimas de crímenes de guerra».
Amnistía Internacional ha expresado su preocupación por los ataques repetidos al paso fronterizo de Rafah y ha hecho un llamado a Israel para que permita corredores humanitarios y garantice el paso seguro para aquellos que deseen escapar del conflicto.
Por último, se insta a todas las partes, tanto a las autoridades israelíes como a los grupos armados palestinos, a cumplir con sus responsabilidades bajo el derecho internacional y a tomar todas las medidas necesarias para proteger a los civiles. Amnistía Internacional actualmente está investigando varios ataques aéreos, incluidos aquellos que han resultado en la trágica pérdida de vidas civiles, incluidos niños.
