El primer partido en el Open de Argentina contra Ugo Carabelli, aunque lo ganó sobradamente, no fue tan fácil para Carlos Alcaraz. Ugo le rompió el servicio varias veces, sobre todo al principio del partido.
Y en el segundo set Alcaraz tuvo que luchar.
A Ferrero, como comentamos en el artículo de ayer, se le veía serio cuando no directamente mosqueado.
Pero hoy ha sido otra historia. Al menos desde el TIE BREAK del primer set, cuando Charlie ha empezado a jugar implacablemente, intentando que su rival no ganase ni un solo punto.
7-1 a favor del Muro del Palmar ha sido el resultado del TIE BREAK.
Y el segundo set ha sido un paseo. No ha llegado a ganarlo por 6-0… quizá por generosidad; pero la generosidad también es una forma de flaqueza. Pero sí ha conseguido ganarlo por 6-1.
Machacando.
He sido en ese segundo set,cuando don Carlos llevaba ganados cinco juegos, que las cámaras han enchufado a Juan Carlos Ferrero y el mundo entero le ha visto sonreír.
«Ese que está jugando ahora» -decía su sonrisa- «es mi chaval, es mi Alcaraz».
Ya estamos en semifinales. El siguiente rival es Alfred Jarry. Un tenista que no es fácil de ganar. Veremos si mañana la sonrisa de Ferrero se hace más amplia o le volvemos a ver tenso mientras juega su pupilo, el gran Carlos Carlitos Alcaraz.
Tigre Tigre
