El Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, ha asegurado que es «totalmente inaceptable» la decisión de Israel de no permitir más convoyes de ayuda humanitaria de la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA) al norte de Gaza, la principal agencia humanitaria en la Franja, donde ya hay personas muriendo de hambre.
«La decisión de no permitir los convoyes de UNRWA hacia el norte de Gaza donde tenemos una dramática situación de hambruna es totalmente inaceptable. Aquellos que han tomado la decisión deben asumir la responsabilidad frente a la historia de las consecuencias de esta decisión en relación con la dramática situación de la gente en el norte de Gaza, donde, como mencioné, ya tenemos a niños muriendo de hambre”, ha afirmado en una rueda de prensa en Amán junto al ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi.
El Secretario General ha dicho que habló con heridos palestinos y con veteranos trabajadores humanitarios que han estado en las peores crisis de las últimas décadas: «Lo han visto todo y aun así, todos sin excepción dijeron que nunca habían visto algo tan horrible como lo que está ocurriendo en Gaza».
Guterres ha insistido en que una invasión terrestre de Rafah, donde Israel obligó a trasladarse a millones de gazatíes, sería «catastrófica». A su vez, se ha comprometido a seguir presionando «para que se eliminen todos los obstáculos a la ayuda vital, para que haya más acceso y más puntos de entrada» al enclave.
El llamamiento del dirigente se produce en un momento en el que la ONU y otros socios humanitarios informan de situaciones cada vez más desastrosas, especialmente en las provincias del norte, donde la OMS ha informado de que 27 niños han muerto por complicaciones relacionadas con la malnutrición grave.
«Debemos afrontar los hechos. No habrá una solución humanitaria sostenible con una guerra en curso tan sangrienta como ésta», ha subrayado el titular de la ONU, para luego añadir: «Permítanme repetirlo: nada justifica los aborrecibles ataques del 7 de octubre y la toma de rehenes por parte de Hamás y nada justifica el castigo colectivo del pueblo palestino».
Siguen los obstáculos a la ayuda
El llamamiento del Secretario General de una paz duradera y un alto el fuego humanitario para permitir la entrega efectiva de alimentos, combustible y medicinas se produce mientras la UNRWA confirma que las autoridades israelíes le han prohibido transportar ayuda al norte del enclave.
Al mismo tiempo, ha informado de que los productos básicos en las provincias del norte eran ahora «25 veces más caros de lo que eran antes de la guerra», con un saco de harina de 25 kg costando más de 400 dólares.
A pesar de las advertencias de que la hambruna es inminente en la franja, «no se ha producido ningún cambio significativo en el volumen de suministros que entran en Gaza ni en la mejora del acceso al norte», ha insistido la UNRWA.
Durante los primeros 23 días de marzo, sólo 157 camiones de ayuda por día cruzaron a Gaza. Esto está «muy por debajo de la capacidad operativa de ambos pasos fronterizos y del objetivo de 500 al día».
La guerra debe terminar
Insistiendo en que hay «una creciente conciencia en todo el mundo de que todo esto debe terminar», el número uno de la ONU ha dicho que una solución de dos Estados es la única manera de garantizar un final duradero al conflicto palestino-israelí.
«Los israelíes deben ver materializadas sus legítimas necesidades de seguridad, y los palestinos deben ver realizadas sus legítimas aspiraciones a un Estado plenamente independiente, viable y soberano, en consonancia con las resoluciones de las Naciones Unidas, el derecho internacional y los acuerdos anteriores», ha afirmado Guterres.
Preocupación ante nuevos asaltos a hospitales
Por su parte, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha expresado su profunda preocupación ante las noticias de que las fuerzas israelíes habían «asediado y atacado» el domingo el hospital Al-Amal de la ciudad meridional de Jan Yunis.
Tedros ha señalado que un trabajador palestino de la Media Luna Roja y otra persona refugiada en el hospital habían resultado muertos. «Se informa de otro ataque contra el Hospital Al-Amal en Gaza, otra situación en la que los pacientes y los trabajadores sanitarios corren un gran peligro«, dijo Tedros en una publicación en X, antes Twitter. «Pedimos su protección inmediata y reiteramos nuestro llamamiento al alto el fuego».
