Las palabras de Míriam Nogueras durante el pleno para la toma de consideración de la ley de amnistía, el pasado martes en el Congreso en contra de algunos jueces sigue creando complicaciones en el ámbito judicial.
El presidente del Tribunal Supremo, Francisco Marín, aplazó ese mismo día la reunión con Félix Bolaños por estos ataques directos al anterior presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, al presidente de la Sala Penal del TS que dirigió el juicio a los líderes del procés en 2019, Manuel Marchena, al instructor de la causa, Pablo Llarena, y a la jueza Carmen Lamela.
Según hemos podido confirmar, el ministro de Justicia llamó a varios de los magistrados para asegurarles que el Gobierno defenderá la independencia judicial. Lo avanzó este viernes El País, Bolaños transmitió a estos jueces que “no solo comparte esas palabras de Junts, sino que en todo momento defenderá la independencia de los jueces y trabajará para que nadie interfiera en ese principio básico constitucional”.
Durante la toma en consideración de la ley de amnistía en el Congreso de los Diputados, Nogueras habló de “personas indecentes que deberían ser cesadas y juzgadas» y que «han permitido y bendecido informes falsos” contra el independentismo catalán, y reclamó ponerles “nombres y apellidos”. También aludió a periodistas y a responsables de medios de comunicación que, según sus acusaciones, “han contribuido de forma consciente a toda esta estafa”.
Además del plantón de Marín al ministro de Justicia, el presidente del CGPJ, Vicente Guilarte, también calificó de “inadmisible los ataques de Nogueras a los jueces”, y anunció que “adoptarán las medidas necesarias previstas por el ordenamiento jurídico para proteger su independencia”. Estas medidas pasarían por el amparo a los jueces y la remisión a Fiscalía en caso de apariencia de delito.
Antes de las llamadas, desde Justicia se aseguró que los jueces pueden contar con el ministro para defenderles de cualquier descalificación y cuestionamiento de su prestigio y para garantizarles que puedan impartir justicia con independencia, en el marco de la Constitución, el Estado de derecho y la separación de poderes.
Esos jueces escandalizados, piden independencia cuando son absolutamente independientes. Las barbaridades que han cometido en el nombre de la Justicia, las han cometido motu proprio, sin que nadie se lo mande. Por decisión propia, pusieron su poder y sus conocimientos a practicar en una guerra política, sin ninguna intención de cumplir con la Justicia. Nadie se lo pidió, nadie les obligó, son independientes. Y culpables.
La mayoría del Poder Judicial está dominado por el Partido oculto que lleva gobernando España desde décadas, el OPUS DEI.
Todo lo demás es una farsa.
Unos funcionarios del Estado que simplemente aprobaron unas oposiciones, están a dominar y a dirigir el propio Estado; y el PSOE baja la cerviz como bellaco y siervo.
Por dignidad: ¡República, ya!