La UCO ha detectado un vínculo entre Koldo y el negocio de las pizarras, que fue puesto en marcha por los empresarios Víctor de Aldama y Juan Carlos Cueto con parte de los fondos investigados, y que en la actualidad es controlado por este último, según consta en el sumario al que ha tenido acceso Diario16. Los indicios de la Guardia Civil apuntan a un supuesto incremento patrimonial injustificado y su correlación temporal con las adjudicaciones públicas. Esta conclusión ha sido obtenida a la luz de los encuentros que han sido observados entre Koldo García, el asesor del ministro Ábalos, y José Luis Rodríguez García, quien a su vez tiene relación con Cueto, titular real del negocio de las pizarras, pues se habría hospedado junto a él en la localidad de Valdeorras –lugar donde radican estas explotaciones de pizarras–. Así habría intentado la trama Koldo blanquear el dinero de las mascarillas con una empresa tapadera de pizarras.
Además, Rodríguez García hace uso de un vehículo titulado por una mercantil vinculada a este negocio del grupo Cueto, y tiene recurrentes conversaciones telefónicas con este relacionadas con las pizarras. De acuerdo a todo lo anterior, las vinculaciones expuestas conectan el nivel de la Administración Pública que tuvo relación con la gestión de los contratos objeto de la investigación –Koldo– con los responsables de hecho de estos contratos –Cueto y Aldama– y con una de las sociedades donde se invirtieron los beneficios obtenidos –siendo el nexo de unión Rodríguez García–. Todas estas ramificaciones del caso están siendo analizadas por la UCO.
Inspección de Hacienda
El día 26 de septiembre de 2023, Cueto decidía que Daniel Sierra sería la persona encargada de comparecer presencialmente ante la AEAT. Había miedo en la red ante una posible investigación fiscal, tal como demuestra el hecho de que “en varias ocasiones Cueto ha expresado su temor a que Aldama comentara algún asunto –desconocido–a la AEAT que no debería de ser trasladado a ese organismo”. Tal como consta en el expediente judicial, el día 3 de octubre de 2023, en una conversación entre Cuerto y María Piedad Losada (trabajadora de Aldama), “convienen que ante la citación por parte de la AEAT para que Aldama compareciese el día 18 de octubre de 2023, el mismo debería asistir a tal citación asistido de un abogado y habiéndose preparado el asunto previamente, ya que debido al temperamento de Aldama pudiera perder los estribos fácilmente y con ello abandonar la línea que pretenden mantener en torno a la inspección”. En la citada llamada, Cueto llega a afirmar que las personas que comparezcan deben de hacerlo con asistencia letrada ya que “…como vaya alguien allí y empiece a largar y rajar, tiene un problema…”
A juicio policial, este miedo podría estar ligado a que Aldama fuera considerado un “comisionista” a ojos de la AEAT, una deducción que es extraída de las conversaciones telefónicas intervenidas de Íñigo Rotaeche [en teoría, el dueño de la sociedad beneficiada por las adjudicaciones, aunque los informes de la UCO insisten en que era Cueto quien controlaba lo que se hacía en Soluciones de Gestión] y Cueto, quienes en varias ocasiones le vinculan al ministerio encargado de los contratos investigados , es decir, el Ministerio de Transportes.
A modo de ejemplo, el día 22 de septiembre de 2023 siendo las 20.45 horas, Íñigo Rotaeche le cuenta a Cueto que el inspector de la AEAT quiere citar a los administradores y socios de Soluciones para que comparezcan ante él. En el transcurso de la llamada, hacen alusión a las supuestas intenciones del “actuario con esta inspección, refiriendo que el actuario no admitiría como gasto a Soluciones de Gestión el pago a Aldama porque habrían pagado una comisión encubierta a Aldama por sus contactos en el Ministerio”.
A este respecto, Íñigo Rotaeche afirma que nadie ha negado que se le pagase una comisión por presentar la oferta “ante el ministerio y las otras”, pero alude a que también ha trabajado, por lo que se ha llevado un 10 por ciento de la operación, si no hubiese cobrado un 2 ó 1 por ciento.
Escuchas y seguimientos
Por lo reflejado en este punto, el interés de Cueto en la inspección de la AEAT iría más allá de las consecuencias de una inspección fiscal a una sociedad que por derecho no le pertenece. Cueto mantiene un miedo superior que le lleva a controlar el devenir de la inspección de las sociedades de Aldama e incluso la comparecencia de este último. Ese miedo superior a la inspección fiscal en curso habría conducido a Cueto a ponerse en contacto con Koldo, extremo que resulta llamativo por varias cuestiones: primero, ninguno de los dos forma parte de los órganos sociales de la mercantil investigada; segundo, Koldo formaba parte de la Administración Pública en el momento de las adjudicaciones públicas investigadas teniendo conocimiento de, al menos, una de las gestiones concernientes a su ejecución; y tercero, Koldo disfrutó de un incremento patrimonial coetáneo a estos contratos públicos, siempre según la Guardia Civil.
El avance de la investigación en curso, a través de la intervención telefónica y la actividad operativa, ha permitido concluir que Cueto da cuenta a Koldo de las cuestiones relativas a estos contratos, entre ellas la inspección de la AEAT, y le pediría que influyera en cuestiones relativas a los contratos investigados.
La Guardia Civil deja constancia en el escrito de fecha 2 de octubre de 2023 de que la proximidad entre el encuentro de Cueto con Aldama –que tuvo por objeto la inspección de la AEAT– y la llamada posterior de Cueto a Koldo para reunirse en persona, apuntaba a que el motivo de ese encuentro era la inspección de la AEAT, es decir, una inspección fiscal a una sociedad cuya titularidad a nivel documental es ostentada por otra persona pero que examina los fondos públicos dimanantes de los contratos investigados.
Como novedad, la cronología ha permitido concluir que ese interés de Cueto por reunirse con Koldo viene ligado a los contratos investigados. El día 5 de octubre de 2023, Cueto contactaba con Aldama con la intención de quedar para verse en persona. Cinco minutos más tarde de que acordaran verse al día siguiente, Cueto llamaba a Kodo para también mantener un encuentro presencial con él. En relación a estas reuniones, el viernes 6 de octubre de 2023, día en que habían quedado Cueto y Aldama para verse en la oficina de este último, agentes de la Guardia Civil observaron cómo Cueto entraba en el edificio donde se encuentra ubicada la oficina de Aldama. Además, Cueto recibió una llamada de una trabajadora, quien le solicitó que subiera a las dependencias de Aldama, ya que éste último se encontraba reunido –extremo que refuerza lo anterior–.
Continuando con otros hitos de interés para la investigación en curso, el día 11 de octubre de 2023, en una llamada de Cueto con Íñigo, ambos conversaron sobre una sociedad denominada Kroll, la cual estaría al tanto de una deuda de Íñigo Rotaeche en Hong Kong. Cuando en este contexto Cueto comenta que hay que buscar asesoramiento legal especializado, se refería a preguntarle a Koldo García. Extremo que se considera de interés porque esta deuda podría tener su origen en los fondos investigados.
